Después de una larguísima vida comercial, hace unos días Dodge anunció que sus actuales muscle cars, la berlina Charger (2011) y el coupé Challenger (2008), se despedirán por todo lo alto en 2023. Con el cese de su producción, la firma estadounidense cerrará un importante capítulo de su historia… pero ya se está preparando para el siguiente.

Durante la Dodge Speed Week, la compañía ha presentado un prototipo del que será el primer muscle car eléctrico de la industria norteamericana: el Charger Daytona SRT Concept. Al contrario que el Charger actual, disponible únicamente como sedán de cuatro puertas, este vehículo conceptual retoma la carrocería coupé de los primeros Charger (1966-1974), aunque añade un práctico portón.

Estéticamente, nos encontramos ante un verdadero muscle car americano. La carrocería ancha y baja, el capó alargado y la musculosa línea lateral rápidamente nos retrotraen a finales de los años 60, mientras que los grupos ópticos oscurecidos se constituyen como un guiño a los faros escamoteables de sus antecesores, lo que le da un aspecto agresivo y amenazante. Las llantas por su parte son de 21 pulgadas.

A pesar de su aspecto clásico, Dodge ha tratado de crear un deportivo verdaderamente aerodinámico. Una de las soluciones clave para lograrlo es la llamada R-Wing: aunque el frontal tiene el aspecto alto y cuadrado típico de un muscle car, en realidad la sección superior del morro es un flap que le da altura visual. La «calandra» dirige el flujo de aire hacia el capó, mejorando con ello la carga aerodinámica.

El Dodge Charger eléctrico se lanzará en 2024

El habitáculo, al igual que el diseño exterior, se muestra sorprendentemente cercano a un modelo de producción. Cuenta con una instrumentación digital curva de 16 pulgadas, una pantalla central de 12,3 pulgadas en formato apaisado y un Head-up Display. También habría que destacar la iluminación ambiental roja y los cuatro asientos individuales.

Aunque no se han revelado sus especificaciones técnicas, sí que se ha confirmado que contará con un sistema de propulsión Banshee que debería permitirle superar las prestaciones de los actuales SRT Hellcat térmicos. Dispone de una arquitectura eléctrica de 800 voltios y de tracción total, por lo que podemos esperar que monte más de un motor eléctrico.

Dodge ha desarrollado algunas funciones especialmente pensadas para los amantes de los coches a la vieja usanza. Este es el caso del Fratzonic Chambered Exhaust, un simulador de escape capaz de alcanzar los 126 dB; el sistema eRupt, una transmisión electromecánica de varias velocidades que busca recrear la «sacudida» típica de las cajas de cambios; y la función PowerShot, que incrementa de forma momentánea las prestaciones para mejorar la aceleración. Dispondrá de cuatro modos de conducción: Auto, Sport, Track y Drag.

Se espera que el Dodge Charger eléctrico llegue al mercado estadounidense en 2024. En un principio, se asentará sobre la plataforma modular STLA Large del grupo Stellantis, la misma que emplearán otras marcas del grupo (Alfa Romeo, Jeep, Maserati…) en sus modelos grandes. La marca insiste en su filosofía: «se conduce como un Dodge, se ve como un Dodge y se siente como un Dodge».

Fuente: forococheselectricos.com